Se debaten hoy distintas cuestiones que nos incluyen como jóvenes. Por un lado, el tema de si un menor de 18 años puede ingresar a un boliche, con o sin consumo de alcohol, con mayores o solo para menores. Por otro lado, también se opina sobre si un menor de 16 años puede votar y elegir sus representantes o no. En el medio, la vida para todos nosotros continúa con iguales altibajos que siempre, pero sin que nadie nos pregunte que opinamos y que “decidimos” sobre nosotros mismos.
Sin embargo, está visto que los jóvenes podemos hacer mas que esperar a que los adultos decidan por nosotros. Pensando en lo que muy pronto se vendrá en nuestra ciudad, la Fiesta Nacional del Inmigrante, nos informamos que más de 600 jóvenes participan de los diferentes ballets que tienen las colectividades. Desde principios de año se reúnen al menos una vez por semana y preparan las danzas, pero además venden platos dulces para pagar sus trajes, cumplen horarios y aprenden de las tradiciones de nuestros abuelos.
Son los mismos chicos que, en menor cantidad, conforman la Subcomision juvenil de colectividades, que organizan el desfile inaugural y que colaboran con todas las áreas de la Fiesta.
Se divierten, cumplen horarios, tienen responsabilidades, pero a la hora de hablar de sus vidas, no tienen voz ni voto. Somos el futuro del país. Nos dicen que las colectividades buscan un recambio generacional y apuestan por los chicos que están dentro de la Fiesta, pero a la hora de mostrar en que estamos preparados, nos dicen que no tenemos responsabilidad suficiente.
¿Somos el futuro del país?
Fuente: www.fiestadelinmigrante.com.ar - Infoberaweb.com.ar
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